Revista de Acción Educativa, Nº 109
Hace unos días el Partido Popular con los votos de su único aliado a lo largo de la legislatura; Coalición Canaria, ha aprobado en el Senado la controvertida LOCE.
De nuevo en la tramitación de esta Ley se ha puesto de manifiesto el desprecio del Partido Popular por la Escuela Pública y todo lo que ésta representa.
Ante la oferta de dialoga de las organizaciones contrarias a esta controvertida Ley la respuesta del partido en el gobierno ha sido la puesta en marcha de una Ley que no es si no un meridiano espejo de la ideología neoliberal y mercantilista según la cual lo cultural y lo educativo sólo poseen matices económicos. En este planteamiento subyace una ideología conservadora favorecedora de las desigualdades sociales.
La LOCE se pone en marcha con la rotunda oposición de amplios sectores de la Comunidad educativa. Recordemos a la Señora Ministra que en las últimas elecciones sindicales aquellos sindicatos que propugnaban el rechazo a la LOCE han recibido el r4spaldo de más del 70% del profesorado. Añadámosle el descontento de los estudiantes y la asociación de madres y madres laicos CEAPA. ¿Quién respalda entonces al gobierno en esta Ley?
La LOCE representa el ataque más brutal de cuantos hemos presenciado hasta ahora contra la Escuela Pública, democrática, participativa, laica, atenta a la diversidad. multicultural. Esa escuela garante de la igualdad de oportunidades que siempre hemos defendido y seguiremos defendiendo, ahora, con más ahínco.
Y por ello, una vez más, la rechazamos.
Rechazamos esta Ley porque la consideramos profundamente autoritaria puesto que presenta una función jerarquizada de la enseñanza y cercena las posibilidades de participación de padres, profesores y alumnos. Porque es antidemocrática ya que anula la elección de director por parte de la comunidad educativa: uno de los símbolos más emblemáticos de la Democracia en la educación.
Rechazamos esta Ley porque es profundamente segregadora. Porque relega a los emigrantes a las personas más desfavorecidas, a quienes más dificultades familiares o económicas tienen. Porque esta Ley cercena el derecho que todas y todos tenemos a la educación.
Rechazamos esta Ley porque sigue manteniendo las prerrogativas y los privilegios de la Iglesia Católica. Porque supone un atentado contra la libertad de conciencia. Es intolerable la intromisión del Estado en materia de religión o de conciencia.
Rechazamos esta Ley porque no respeta ni la realidad, ni la riqueza ni la historia de las distintas Autonomías que configuran el Estado español.
Rechazamos esta Ley porque es ignorante. Porque desmantela todos los logros conseguidos en la Educación Infantil. Porque convierte el Primer Ciclo de esta etapa en algo meramente asistencial, ignorando que para el desarrollo optimo de los más pequeños es preciso que crezcan en un clima de confianza y afecto que les proporcione seguridad, confianza, riqueza de estímulos…
Rechazamos esta Ley porque carece de cualquier fundamentación pedagógica. Porque tiene una visión muy particular de la cultura fracaso y del esfuerzo.
Acción Educativa y la Federación de Movimientos de Renovación Pedagógica exigimos al gobierno se esfuerce en dar a nuestros estudiantes las mismas oportunidades que tienen el resto de los estudiantes europeos. Le exigimos que se esfuerce en lograr que ningún alumno ni alumna sea segregado y que todos gocen de la igualdad de oportunidades que la Constitución señala. Le exigimos que se esfuerce en procurar los medios necesarios para integrar a los más desfavorecidos, a los que forman esta sociedad multicultural que tantos nos enriquece. Le exigimos que se esfuerce en hacer de la democracia y la participación un estandarte.
Y le señalamos para recordarle que él tendría que ser el principal valedor de lo público. porque es este ámbito es donde todas y todos nos manifestamos más iguales y más libres.
El paso de esta Ley por el Senado de esta Ley ha sido tan lamentable como esperábamos. Ahora viene el tiempo de la reflexión y la acción. El tiempo de continuar elaborando materiales, ideas, pensamientos y acciones que sigan transformando nuestras escuelas, lejos, muy lejos de la arrogancia y los planteamientos anacrónicos del Partido Popular plasmados en esta Ley.