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Recordando a Plinio….

Este verano en nuestra Escuela ya no podrá estar con nosotros Jesús Ángel Remacha como era su deseo. La muerte nos lo ha arrebatado antes de ayer, en silencio, de improviso y dejando una gran pena en nuestro corazón. Se ha ido un trocito de nosotros, de nuestra historia, de nuestra pasión por enseñar y aprender de otra manera, de nuestro amor por la literatura, por la libertad, por la democracia y por la Escuela.Pública.

Querido amigo, te queremos.

Así comienza su blog “LAS CARAS Y LAS MÁSCARAS”.

https://www.blogger.com/profile/02381501535164419267

“Soy un firme defensor de la ESCUELA PÚBLICA Y LAICA. La ESCUELA PÚBLICA es un pilar fundamental del Estado de Derecho, de la Democracia……Gracias. SALUD, REPÚBLICA, QUE VIVA LA ESCUELA PÚBLICA.

Colgaba este escrito hace poco en su facebook:

CUADERNO DE BITÁCORA 8
García Márquez, siempre ha declarado que tardaba un día en escribir una página. El tan ávido lector, escritor tan ávido.
Plinio fue un lector impenitente y convulsivo. Corría una maratón diaria y, de este modo, recorrió ochenta veces la vuelta al mundo en ochenta libros. Y ochenta veces más…
-Chus, no leas que te vas a quedar ciego -le decía su abuelita.
-No puedes estudiar -le dijo su primer oculista.
-No sabes nada de nada -sentencio su profe de literatura, -el músculos-, tan fascista como infame. -Dedícate a otra cosa. Vende braguitas donde tus tías. Te irá mejor.

Crecí así. Crecimos así. Contra Franco y contra aquella cuadrilla de canallas que se apropiaron de un país y y un futuro que no ls pertenecía. Un futuro que era nuestro.

Pero leí y viaje. Más de diez mil libros. Y creo que lo he hecho bastante bien. Vietnam, Camboya, Myanmar, India, Polonia… India otra vez, Perú, Bolivia, Uruguay… Incluso Nueva York.

–Vete a la Conchinchina -me dijeron. Y me me fui. Y a los túneles de Cu-chi, donde los vietnamitas derrotaron a los yanquis. Y a la bahía de Ha-Long. Y, otra vez, me enamore de quien no debía.
Pero antes había estado en media Europa. Había leído desde Catulo y Jenofonte, a Marx, a Engels, a aquel socialista utópico llamado Saint-Simon. Así me hice comunista. A Spinozan
Y entre tanto…
Saramago, siempre Saramago.
…Pero nada comparable al sueño de conocer La Habana. De viajar a Cuba. De aquel febrero de 1986.
Pero nada comparable a aquel verano único, de una ilusión indescriptible, allí en El Salto, en Jinotega, en Nicaragua…
Mientras avanzamos a la Revolución…

Hubiera sido un excelente vendedor de braguitas. Pero haber sido un buen profesor, ha sido el mejor de los regalos.
Gracias -musculitos-: me hice profesor para no ser tan impresentable como tu.

Artículo en  la Revista de Acción Educativa del año 1999:

La lectura es la mejor arma contra el fascismo, la violencia, la desigualdad….Para demostrarlo el autor ofrece una selección de libros que poseen un compromiso moral y cívico, audaz y valiente, y que posibilitan una sociedad de izquierdos y derechos humanos, más libre e igualitaria.

 

Voces por Plinio:

Si mi voz muriera en tierra,
Llevadla al nivel del mar
y dejadla en la ribera…
¡Hasta siempre!
MQR

Marga Quintanilla

Muchos y buenos los momentos vividos junto a Plinio. De las tardes de lectura e historia en la EV, hace ya muchos años, a las noches en las Cuévas de Sésamo llenas de poesía y sangría. O los paseos por el Retiro o por estas tierras gallegas. Plinio, siempre entregando (y buscando a la vez) ternura y cariño.
Donde quiera que esté ese lugar tricolor desde donde nos mira no está solo; ahí también están La Conejita Marcela y Ferdinando, el toro y el conejo que quiso robar Hitler. Gracias Plinio. Salud y República.

Xosé Manuel Alonso “Peplinio”

Amigo Plinio:
¡Qué cosas tienes!
Estábamos citados dentro de unos días y nos vas a dejar con las ganas. La gran familia escuelaveranista en general, y la cofradía itañola en particular en lo que a nosotros respecta, te vamos a echar mucho de menos.
Quizá estés entre Cuba y Nicaragua con un buen ron añejo, pero no creas que nos sirve de consuelo.
Tantas emociones compartidas, tantas veladas, tantos kilómetros…
No va a ser nada fácil intentar hacerse a la idea.
Que te queremos mucho y que no se nos va a cerrar la herida.
Que lo sepas.

José Félix